"Hasta hoy tenemos 83 casos confirmados en al menos cinco nacionalidades, siendo la nacionalidad Kichwa la que tiene más casos con 44 contagiados, la Achuar con 12 casos, 17 en la Siekopai (algunos se han recuperado), 2 en la nacionalidad Waorani. También hay 8 casos confirmados en la nacionalidad Shuar en la provincia de Zamora-Chinchipe (sureste)", dijo Andrés Tapia, vocero de la Confeniae, en rueda de prensa virtual.
Las cifras fueron confirmadas por la Confeniae dentro de las respectivas comunidades, en coordinación con los presidentes de cada una de las nacionalidades, ante la falta de datos desagregados oficiales.
Mientras tanto, Nemonte Nenquimo, presidenta del Consejo de Coordinación de la Nacionalidad Waorani de Pastaza, aseguró que la vía de contagio de 2 miembros de esa nacionalidad se originó en dos trabajadores de la empresa petrolera Repsol, que dieron positivo a las pruebas de COVID-19.
Según la dirigente, las actividades petroleras que se desarrollan en la zona constituyen un riesgo, tanto para la nacionalidad Waorani como para los pueblos Tagaeri y Taromenane, que viven en aislamiento voluntario cerca de la zona donde opera la empresa española.
También expresó su preocupación por los trabajos mineros desplegados en la zona, actividad que dijo fue la que llevó la enfermedad a las comunidades Waorani.
Por el contrario, dijo la dirigente, esa dependencia del Ejecutivo garantizó, en plena emergencia sanitaria, que varias mineras ingresen a las comunidades de las provincias de Napo, Pastaza y Orellana, localizadas al este del país sudamericano.
Nenquimo y Tapia pidieron el cese de las actividades minera y petrolera, ante el inminente peligro de un aumento de posibles contagios de COVID-19 por la entrada y salida de trabajadores en las provincias amazónicas.
