"Nosotros a toda hora llamamos a poner fin a los enfrentamientos bélicos, a hacer una pausa humanitaria con motivo del Ramadán, y (...) apoyamos cualquier iniciativa que permita poner fin a la matanza y retornar a la mesa de negociaciones", dijo el interlocutor de Sputnik.
Horas antes se informó que el Ejército Nacional Libio (ENL) dirigido por el mariscal Haftar, decidió retirar sus unidades a dos o tres kilómetros de Trípoli con motivo de la fiesta del Eid al Fitr, que marca el fin del ayuno del Ramadán, mes sagrado para los musulmanes.
El ELN reveló que espera que el Gobierno de Trípoli siga su ejemplo "para evitar el derramamiento de sangre en el fin del Ramadán", idea que comparte Rusia.
"Instamos a todos los que participan en los enfrentamientos bélicos a poner fin a su actividad militar y encaminar la situación por una vía que conduzca a la paz", destacó la fuente diplomática.
Libia continúa sumida en una crisis desde que la caída del que fuera su líder durante décadas, Muamar Gadafi, en 2011, derivó en violentos enfrentamientos entre facciones rivales.
Actualmente en el país hay una dualidad de poderes:
- el Gobierno interino junto con el Parlamento en Tobruk, que controla la parte oriental y cuenta con el apoyo del ENL,
- y el Gobierno de Acuerdo Nacional, con sede en Trípoli, en el noroeste del país.