"Los Gobiernos deben actuar para reducir sustancialmente el número de niños en los centros de detención", dijo Jo Becker, directora para la defensa de los derechos del niño de HRW.
El organismo apuntó que desde el inicio de la pandemia solo unos 20 países han puesto en libertad a los niños prisioneros, mientras que los adultos han sido liberados en al menos 79 países.
En este contexto HRW llamó a las autoridades a liberar a los menores que permanecen en centros de detención juvenil, cárceles y otros lugares de detención y que no representan riesgo significativo e inmediato para la seguridad de los demás.
"Los niños nunca deben ser detenidos a menos que se hayan agotado todas las demás opciones", enfatizó Becker, al agregar que la necesidad de poner en libertad a menores en medio de la propagación del coronavirus se hace más urgente.