"Estamos preocupados por el agotamiento de suministros, en particular del equipo de protección personal (EPP). Es difícil para nosotros estar seguros de futuros suministros de artículos esenciales, incluido el EPP", declaró a Sputnik el coordinador de la MSF para operaciones en Siria, Emmanuel Massart.
Según él, también existe el riesgo de carencia de suministros de otros artículos médicos ya que la producción de medicamentos genéricos y equipos médicos se ralentizó o se suspendió.
La situación, continuó Massart, también está agravada por las limitaciones a exportaciones o importaciones de medicamentos de la primera necesidad (antibióticos o medicamentos antirretrovíricos).
Muchos países introducen varias restricciones para viajes y "las reglas cambian cada día y esto limita la posibilidad de MSF de enviar a nuestro personal hacia nuestros proyectos", subrayó.
"De momento podemos continuar las actividades médicas, pero el personal en el terreno ya tiene que trabajar horas adicionales. Y es posible que tengamos que poner en espera varios proyectos que exigen a especialistas médicos que no podemos atraer ahora mismo", añadió Massart.
Desde el 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud califica como pandemia la enfermedad covid-19 causada por el coronavirus SARS-CoV-2 detectado en la ciudad china de Wuhan a finales de 2019.