Según informaciones de sus representantes recogidas por el portal de noticias G1, el portavoz, de 59 años, "se encuentra bien" y está cumpliendo "aislamiento social en casa".
El portavoz oficial del presidente suma así un nuevo caso de COVID-19 en el Gobierno, después de que en marzo, al menos 23 personas que estuvieron con Bolsonaro en un viaje oficial en Miami (EEUU) también se contagiaran.
Después de que se confirmara la enfermedad en personas muy próximas, entre ellos al menos tres ministros, el presidente se realizó dos test, que según él dieron negativo.
El líder ultraderechista se negó a mostrar los resultados de los exámenes, y hay dos peticiones para obligarle a que los haga públicos (una en la Justicia, movida por el diario Estado de Sao Paulo y otra en la Cámara de Diputados).