"Apoyamos el llamamiento del secretario general de la ONU, el llamamiento de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos a que estas sanciones unilaterales y contrarias a la ONU, sean como mínimo suspendidas o, en términos ideales, canceladas", dijo Lavrov al término de una reunión informal por videoconferencia de los ministros de Exteriores de los países del Grupo BRICS.
El jefe de la diplomacia rusa destacó que en la actual situación esas medidas restrictivas que "violan el derecho internacional", no solo impiden la lucha contra la pandemia del coronavirus, sino causan daños importantes al desarrollo social y económico de ciertos países.
Apoyo de Rusia a la OMS
Además, Lavrov declaró que Rusia seguirá apoyando a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Continuaremos apoyando a la Organización Mundial de la Salud, independientemente de cómo ciertos países intenten expresar su actitud hacia sus actividades", dijo Lavrov.
"Por supuesto, esta es una estructura que reúne a los mejores profesionales de todos los países, sin excepción, también de Estados Unidos", añadió.
A principios de abril, el líder estadounidense Donald Trump anunció que EEUU suspendería los fondos para la OMS, acusando a la organización de estropear la respuesta al brote de COVID-19.
La víspera, el Ministerio de Exteriores de China anunció que el Gobierno chino destinará otros 30 millones de dólares a la OMS para combatir la pandemia del nuevo coronavirus, en adición a los 20 millones asignados en marzo.
Ayuda financiera
El préstamo de 15.000 millones de dólares del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD) del grupo BRICS permitirá a los países miembros superar la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, declaró el ministro de Exteriores de Rusia.
"En el marco del banco se aprobó una decisión de principio de crear un instrumento especial crediticio para financiar los proyectos de recuperación económica en los países BRICS, en total se prevé destinar hasta 15.000 millones de dólares a estos fines", dijo Lavrov.
El canciller ruso añadió que estos fondos serían "un muy buen apoyo en la etapa de salida de las economías de nuestros Estados del estado de crisis y la reanudación de las actividades económicas".
Además del tema financiero, los participantes de la teleconferencia debatieron el mecanismo conjunto de creación de vacunas.
"Hoy analizamos la situación y subrayamos la necesidad de realizar cuanto antes ese acuerdo, crear lo más pronto posible ese mecanismo porque todavía no ha empezado a trabajar", dijo el canciller ruso.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, también instó a los países del grupo BRICS a respaldar la OMS, al señalar que juega un importante papel en la coordinación de la cooperación entre los Estados en la lucha contra la epidemia de coronavirus.
"Los países BRICS deben respaldar todos los mecanismos de la ONU contribuyendo a que actúen debidamente al combatir la epidemia de coronavirus. La Organización Mundial de la Salud juega un papel clave en la coordinación de la cooperación global en esta lucha", dijo Wang Yi durante una reunión extraoficial de los cancilleres del BRICS celebrada online.
Según el canciller, el apoyo a la OMS es de extrema necesidad para la prestación de ayuda a los numerosos países en desarrollo, sobre todo los africanos, en su batalla contra la epidemia.
Además recordó que China ha asignado últimamente a la OMS 50 millones de dólares y expresó la esperanza de que estos medios ayuden a satisfacer las demandas impostergables de los Estados en desarrollo.
En respuesta a los defectos que puso al desnudo la crisis provocada por coronavirus, es necesario contribuir al perfeccionamiento de la administración global en materia de sanidad, indicó Wang Yi.
Desde el 11 de marzo, la OMS califica de pandemia la enfermedad COVID-19 causada por el coronavirus SARS-CoV-2, detectado por primera vez en la ciudad china de Wuhan a finales de 2019.
A escala global se han registrado hasta la fecha más de 3 millones de casos de infección por el nuevo coronavirus, incluidos más de 212.000 decesos, según la universidad estadounidense Johns Hopkins.
