"En los próximos días se espera el regreso de unos 2.000 trabajadores desde Jordania. Planeamos realizar pruebas a todos y retenerles hasta que estén listos los resultados. Las fronteras están cerradas, pero los países llegaron a un acuerdo al respecto. Alrededor de 1.000 personas han regresado ya de Egipto", declaró Shakhra.
Según el funcionario, las pruebas son obligatorias para todos los repatriados y se harán principalmente en la provincia de Hebrón, al sur de Jerusalén, y en la Franja de Gaza.
"Claro que estamos preocupados a la luz del Ramadán, es por eso por lo que prestamos tanta atención a todos los que vuelven, reforzamos los controles fronterizos y prohibimos la entrada a nuestro territorio sin realizar pruebas. Ellos [los repatriados] tienen que aislarse en sus hogares para 14 días", señaló Shakhra.
Hasta este 24 de abril se registraron 482 casos de infección por el coronavirus SARS-CoV-2 en Palestina, incluidas 4 muertes.
Desde que comenzó la epidemia, las autoridades sanitarias de Palestina hicieron 29.500 pruebas de COVID-19, según Shakhra.
"Realizamos de 2.500 a 3.000 pruebas diarias en este momento. Los pacientes asintomáticos representan el 90%, el restante 10% son casos complicados, principalmente ancianos, pero no tenemos pacientes graves", apuntó.
El funcionario de salud dijo que, por el momento, hay suficientes kits de diagnóstico en Palestina, aunque no está claro por cuánto tiempo darán abasto.
"China nos ha proporcionado pruebas, también las hemos adquirido por nuestra cuenta. Nuestros compatriotas en Estados Unidos y Europa nos ayudan, al igual que los países árabes", dijo.
Uno de los desafíos que afronta estos días el Ministerio de Salud, según él, es recabar de Israel la información sobre los palestinos infectados en Jerusalén.
"Los problemas surgen cuando necesitamos obtener información sobre pacientes en Jerusalén. A veces no podemos acceder a los resultados o conocer la situación epidemiológica de los palestinos allí. Tenemos a 144 personas enfermas en Jerusalén en este momento, pero no tenemos datos sobre algunos de estos pacientes", dijo Shakhra.
El funcionario precisó que el ministerio desconoce la situación de hasta la mitad de estos enfermos.
"Queremos ayudar a nuestros ciudadanos, porque Jerusalén es nuestra capital. Vamos a plantear esta cuestión nuevamente a través de nuestro ministro de Salud", dijo Shakhra.
Sobre la evolución de la pandemia en Palestina, el funcionario de Salud opinó que la curva de contagios alcanzaría el pico a principios del verano, con un posible rebrote en otoño.
Desde el 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud califica como pandemia la enfermedad COVID-19 causada por el coronavirus SARS-CoV-2 que fue detectado en la ciudad china de Wuhan a finales de 2019.
A escala global se han registrado hasta la fecha más de 2,7 millones de casos de infección por el nuevo coronavirus, incluidos más de 190.000 decesos, según la universidad estadounidense Johns Hopkins.
