Consumidores estadounidenses, europeos, asiáticos y latinoamericanos continúan con el consumo de aguacate. La fruta ha adquirido popularidad a lo largo del mundo por ser un producto sano, pues posee grasas insaturadas, vitamina E y potasio. Por ello, los nutricionistas recomiendan comerlo con frecuencia.
Para evitar que el aguacate entre en un estado de putrefacción, lo mejor será conservarlo en el congelador. Lo primero que se debe revisar es el estado del fruto, lo ideal es que esté maduro. Después, se debe partir el aguacate a la mitad, quitarle la semilla y retirar la cáscara cuidadosamente. Al momento de retirar la pulpa, se recomienda hacerlo con una cuchara para evitar dañar a la fruta.
Otra forma de congelar el aguacate es haciéndolo puré, ya sea con la ayuda de un batidor o aplastándolo manualmente. Una vez aplastado vierte un poco de jugo de limón o vinagre planco sobre la superficie; de esta forma, evitarás que se oxide y se ponga de color oscuro. Luego guárdalo en un recipiente hermético dejando las orillas libres para evitar que se maltrate.
Cabe aclarar que, durante el proceso de refrigeración, la consistencia del aguacate cambiará. Por lo que lo recomendable es consumirlo en guacamole, hummus o en puré, como complemento de otros alimentos.
El aguacate puede conservarse congelado hasta seis meses, según la potencia del congelador. Pero si al momento de extraerlo, observas que la superficie se oscureció, lo ideal es retirar esa parte y consumir lo que queda.
