AvtoVAZ dejó de usar el nombre Zhiguli en la década de 1990 y lo sustituyó por los números de las series. Se trata de los automóviles de las series VAZ-2104, VAZ-2105, VAZ-2106 y VAZ-2107, producidos en aquella época. Sin embargo, la palabra zhiguli se hizo tan popular que los automovilistas continuaron usándola.

En los medios rusos y, luego, en el lenguaje común, empezaron a llamar a los zhilgulis simplemente el clásico. Y es que, efectivamente: para muchos los automóviles de la marca Zhiguli se convirtieron en lo original, en el legado y en el antecesor directo de los modelos posteriores que copiaron las modificaciones más exitosas y convenientes de los zhilgulis.

Entre otras cosas, el trato especificaba los modelos específicos que serían producidos en la URSS: fueron dos automóviles ordinarios de dos tipos de carrocería. Algunos de ellos fueron el sedán VAZ-2101, el auto familiar VAZ-2102 y el auto lujoso VAZ-2103. Las partes determinaron que el prototipo para el futuro automóvil soviético sería el Fiat 124, al que en 1967 se le otorgó el título del Automóvil del Año.

Los expertos soviéticos tuvieron la oportunidad de conocer y examinar el auto italiano por primera vez en verano de 1966. En esa ocasión lo pusieron a prueba sometiéndolo a las carreteras de la Unión Soviética. A raíz de estas pruebas los especialistas se dieron cuenta de que los autos italianos tenían problemas con la durabilidad de la carrocería y de los frenos de disco traseros en las carreteras de la URSS.

Uno de los rasgos distintivos de la primera serie de los autos de la empresa AvtoVAZ fue la simplicidad del mantenimiento. Los recambios para los zhigulis en la URSS y, después, en Rusia siempre se han vendido a precios bajos. Aquí reside otra de las ventajas de la marca: la posibilidad de reparar el auto con tus propias manos, lo que tiene que ver con la simplicidad de su fabricación.

Si un automóvil tenía un problema técnico, en la mayoría de los casos no hacía falta ir al mecánico. Esto explica por qué lo vehículos de AvtoVAZ fueron tan populares en un país socialista como la URSS. En la Unión Soviética la prioridad siempre fue hacer productos de alta calidad para que sirviesen durante muchos años. Además, el propio auto se vendía a precios asequibles.

En cuanto a los sustitutos de la marca, a partir de finales de 1984 empezó la producción de los autos más modernos de tracción delantera Sputnik. El primer automóvil de la serie fue bautizado como VAZ-2108.

Luego, ya después de la disolución de la URSS, en la Rusia contemporánea comenzó la fabricación de los Lada Granta, concebido para el gran público. A pesar de que ya existen nuevas series de los Lada, muchos conductores rusos siguen usando zhigulis.

Esta familia de autos se ganó su amor y adoración por su simplicidad y precios asequibles. Hasta hoy existen aficionados a esta familia de autos en diferentes partes del mundo, incluida América Latina. Y no parece que vaya a cambiar pronto.