Según la Policía Nacional, los tres detenidos en Madrid utilizaban armas de fuego para amenazar a los empleados y llevarse el dinero de la caja. Para ello, dos entraban dentro del negocio, mientras que el tercero vigilaba en el exterior. Sustraída la recaudación de la farmacia, huían a la carrera. Un modus operandi que repitieron en 11 atracos distintos y que permitió que fueran identificados.
Las fuerzas de seguridad también arrestaron a un hombre por cometer supuestamente cinco atracos en comercios de Palma de Mallorca. El primero, sucedido el 7 de abril, fue contra una farmacia, donde el detenido amenazó con un arma blanca al trabajador, antes de huir corriendo con el dinero de la caja.
Los agentes constataron que se era el mismo individuo que, presuntamente, había robado en otros cuatro establecimientos palmesanos. El hallazgo de ropas y evidencias durante el registro de su domicilio permitió a los policías demostrar la participación del detenido en los robos. El juez ha decretado su ingreso en prisión.
Dispositivo policial
Esta oleada de robos ha provocado la puesta en marcha de dispositivos de seguridad específicos contra el robo en farmacias durante las 24 horas del día. Según la comisaria principal de la Policía Nacional, María Pilar Allué, se ha incrementado la vigilancia con presencia activa y, sobre todo, con las unidades de seguridad ciudadana.
Dos semanas antes los Mossos d’Esquadra incrementaron su patrullaje en toda Cataluña, después de que el lunes 30 de marzo se cometieran cuatro atracos a farmacias en Barcelona. El objetivo del cuerpo de seguridad catalán es proteger a este tipo de negocios, pero también a otros, como panaderías o gasolineras.
