"Encontramos que incluso una sola dosis podía esencialmente eliminar todo el ARN viral en 48 horas y que incluso en 24 horas había una reducción realmente significativa", reveló la Dra. Kylie Wagstaff, que dirigió el estudio.
Hasta ahora solo se han realizado las pruebas in vitro. Las pruebas en personas serían el siguiente paso de la investigación.
"La ivermectina es muy utilizada y considerada un medicamento seguro. Necesitamos averiguar ahora si la dosis en la que se puede usar en humanos será efectiva, ese es el siguiente paso", afirmó Wagstaff.
Todavía no se conoce el mecanismo por el cual la ivermectina mata al virus. Basado en su acción en otros virus, es probable que el fármaco impida que el virus disminuya la capacidad de las células anfitrionas para eliminarlo.
El uso de la ivermectina para combatir el COVID-19 dependería de los resultados de más pruebas preclínicas y, en última instancia, de ensayos clínicos.
Los científicos esperan que pueda pasar al menos un mes antes de las pruebas con humanos.
El estudio es el trabajo conjunto del Instituto de Descubrimiento de Biomedicina de Monash y el Instituto de Infección e Inmunidad Peter Doherty. Se publicó en Antiviral Research.
