Con base en la consulta a expertos que colaboran en su fundación, el magnate estadounidense elaboró una propuesta de tres puntos. A partir de ella pretende apoyar la toma de decisiones de las autoridades en Washington, aunque muchas de ellas también pueden ser válidas para otros países.
En segundo término, el fundador de Microsoft destaca la necesidad de lograr que las pruebas para comprobar los casos de coronavirus sean "accesibles y frecuentes". Gates citó el caso de Nueva York y Seattle, ciudades donde las pruebas se intensificaron y permitieron la identificación más rápida de voluntarios para ensayos clínicos, un aspecto que, en su opinión, es clave para saber cuándo podrán volver las cosas a su cauce.
Sobre este punto, Gates hizo un llamado a Washington, ya que es allí donde se concentran los poderes necesarios para conseguir que se intensifiquen las pruebas en la población, así como para ayudar a que se adquieran los utensilios y equipos necesarios para cuidar que los trabajadores de los hospitales no adquieran la COVID-19.
Moxi está diseñado para actuar en hospitales y reducir las cargas de trabajo del personal de enfermería. Así, recoge suministros, ropa de cama sucia o entrega sábanas nuevas, lo que haría que los sanitarios no estuvieran tan expuestos a las enfermedades 👇https://t.co/8QZ14Cthc4
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) March 31, 2020
Finalmente, el magnate estadounidense sugirió que el desarrollo de tratamientos y vacunas parta de un enfoque basado en datos. Para lograrlo, Gates mencionó que los líderes políticos deben ser los primeros en no crear rumores ni alentar compras en momentos de pánico, en particular al recordar el caso de la hidroxicloroquina y las pruebas clínicas para probar su eficacia contra el coronavirus, promocionadas por Donald Trump el 21 de marzo.
En 2015, Bill Gates mencionó durante una charla TED que la próxima amenaza que afectaría a la humanidad sería una pandemia.
"Para una gran epidemia se necesitan millones de personas trabajando. La falta de preparación podría hacer que la próxima epidemia sea mucho más devastadora que la del ébola", comentó para aquel entonces.
EEUU es el país con más casos de coronavirus en el mundo. A 1 de abril son más de 200.000 los positivos registrados.