El 26 de marzo la coalición de países árabes, liderada por Arabia Saudí, respaldó la intención del Gobierno yemení de sumarse a la tregua con los rebeldes hutíes propuesta por la ONU por la propagación del coronavirus.
"Son pasos en la dirección correcta. La guerra en Yemen duró más de cinco años y llevó sufrimientos y destrucciones inusuales", resalta el comunicado.
Asimismo agrega que a los retos existentes se unió una nueva amenaza que es el coronavirus, por eso, según la UE, los bandos deben rendir armas y unirse a los esfuerzos comunes para encontrar la paz.
Yemen vive desde 2014 un conflicto armado entre los partidarios del presidente, Abdo Rabu Mansur Hadi, y los rebeldes hutíes.
En marzo de 2015 intervino en el conflicto, del lado de Hadi, una coalición militar liderada por Arabia Saudí, que incluye a los Emiratos Árabes Unidos y otros países árabes.
A finales de 2018, los bandos del conflicto celebraron negociaciones en Estocolmo bajo los auspicios de la ONU, se comprometieron a suspender las hostilidades, retirar las tropas del puerto de Al Hudaida, establecer un mecanismo para el canje de presos y evitar la escalada de la violencia, pero hasta la fecha esos acuerdos no se cumplen.