"Estamos buscando concertar una fecha para la elección que al mismo tiempo que preserve y garantice la elección limpia y transparente también tome en cuenta la necesidad de preservar la salud de todos los bolivianos", dijo a reporteros el presidente del TSE, Salvador Romero.
Tras una reunión de los vocales del TSE con delegados de los ocho partidos y frentes inscritos para los comicios que estaban convocadas para el 3 de mayo y quedaron en suspenso por la crisis sanitaria, Romero dijo que todas las candidaturas respaldaron la decisión de paralizar el proceso preelectoral tomada el 21 de marzo por el órgano electoral.
Romero anunció que el diálogo entre el TSE y las organizaciones políticas continuará en "una fecha cercana" en busca de "un consenso que se traduzca en una ley aprobada por la Asamblea Legislativa que se dé en el mismo espíritu que las leyes aprobadas entre noviembre y diciembre" pasados.
El parlamento, en cuyas dos cámaras el Movimiento Al Socialismo de Morales tiene más de dos tercios de votos, aprobó entonces las leyes de designación de nuevas autoridades electorales y de convocatoria a las elecciones de mayo, siguiendo un acuerdo de pacificación tras la caída del gobierno de Evo Morales por el golpe contra su victoria en las elecciones de octubre, que terminaron anuladas por denuncias de fraude.
Áñez, en cambio, aparecía estancada en tercer lugar, detrás del expresidente Carlos Mesa (2003-2005).
Morales, en el exilio desde octubre, está prohibido de volver a ser candidato presidencial y disputa actualmente en la justicia su inhabilitación como candidato parlamentario, decidida el mes pasado por el TSE con el argumento de que no cumple el requisito constitucional de residencia permanente en el territorio nacional.