"Este fue un accidente trágico con consecuencias fatales", reconoció Crispin Orr, inspector jefe del departamento de Accidentes Aéreos de la autoridad británica.
Tampoco el aparato que cayó en aguas del Canal de la Mancha contaba con la licencia apropiada, de acuerdo con el resultado definitivo de la Rama de Investigación de Accidentes Aéreos.
"Ni el piloto ni el avión tenían las licencias y los permisos para operar comercialmente", concluyen los investigadores británicos.
Sala falleció a consecuencias del terrible siniestro en el vuelo que emprendió desde Francia al Reino Unido el 21 de enero de 2019.
El cuerpo del deportista se rescató semanas después de una intensa campaña de presión y protesta pública de sus familiares.
"Alquilar aviones que no tienen licencia de transporte comercial —los llamados 'fletes grises'— arriesgan vidas", declaró Orr.
El informe recomienda una serie de modificaciones para tratar de evitar tragedias similares en vuelos privados en el Reino Unido.
