La capital venezolana albergó dos movilizaciones. Una fue convocada por Guaidó y tenía como objetivo llegar a la Asamblea Nacional. Mientras que la otra, encabezada por Cabello, se concentró en las calles de Caracas con los partidarios del Gobierno de Nicolás Maduro.
Durante las movilizaciones, el presidente de la ANC dejó en ridículo a la movilización convocada por Guaidó, pues esta no logró contundencia. Inicialmente, su objetivo era llegar a la ANC, pero terminaron marchando tan solo unas cuadras.
"¿Y la derecha que hizo? Lo mismo de siempre, el ridículo. Ese liderazgo hizo el ridículo otra vez. Convocaron a su gente. Iniciaron actos de violencia para tomarse la foto porque lo que querían era la foto porque ellos creen que con una selfi van a tumbar al Gobierno revolucionario", denunció Cabello.
Además, Cabello repudió que se generaran actos de violencia en territorio venezolano en contra del Gobierno legítimo del presidente Nicolás Maduro.
El 10 de marzo, miles de manifestantes chavistas marcharon con banderas, carteles y tambores para demostrar su lealtad con la Asamblea Nacional Constituyente mientras que Guaidó anunció una nueva movilización para el 12 de marzo.