"Recemos al Señor también por nuestros sacerdotes, para que tengan el coraje de salir y acudir a los enfermos, llevando la fuerza de la Palabra de Dios y la Eucaristía y acompañen a los trabajadores sanitarios, los voluntarios, en este trabajo que están haciendo", dijo el pontífice, citado por Vatican News, el portal oficial de la Santa Sede.
El obispo de Roma recordó que "la ofrenda de la celebración es para los que sufren del coronavirus, para los que curan a los enfermos".
Según la página web oficial de la Santa Sede, esta medida, concordada con las últimas decisiones del Gobierno italiano, estará en vigor hasta el 3 de abril.
El 9 de marzo el primer ministro italiano Giuseppe Conte introdujo varias restricciones en todo el territorio del país, como la limitación de los desplazamientos, el cierre de bares y restaurantes después de las 18.00, la clausura de los gimnasios, piscinas, discotecas y otros lugares donde se pueda producir el hacinamiento de gente.
Según las últimas informaciones, el total de los casos positivos del coronavirus en Italia ascendió a 7.985.
El virus causó 463 decesos, mientras 724 personas lograron curarse.