El presidente de la farmacéutica, José María Fernández, explicó a la prensa que el tratamiento que proponen es con Aplidina, un medicamento para el cáncer hematológico que, según sostiene, ya está aprobado en Australia y en fase de aprobación en Taiwán, Nueva Zelanda y Corea del Sur.
Tras anunciar que en menos de un mes podrían tener listo el tratamiento contra el COVID-19, en comparación a los 12 o 18 meses que podrían demorar otras farmacéuticas en crear y comercializar la vacuna, PharmaMar disparó sus acciones en más de un 15%.
Ya en 2017, la empresa PharmaMar intentó comercializar la Aplina, cuyo principio activo es la plitidepsina, sin embargo, la Agencia Europea del Medicamento lo desautorizó en dos oportunidades.
También precisa que esta empresa recurrió dos veces a esta decisión y en 2018 presentó una demanda contra la Comisión Europea para que se aclararan los criterios que se toman en cuenta para autorizar la comercialización de un medicamento.
