"Las bibliotecas populares tienen un rol fundamental en la promoción de la lectura y en la construcción de nuevos lectores, por eso asumimos este esfuerzo como una gran responsabilidad", informó el funcionario durante una rueda de prensa.
La duplicación del aporte se decidió a raíz de un acuerdo entre el Ministerio de Cultura y la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip) en el que también participó la Fundación El Libro, la Cámara Argentina del Libro, y la Cámara Argentina de Publicaciones.
"El sector editorial ha sido castigado en estos años, entre 2016 y 2019 la producción cayó en un 50%, y las ventas también han caído muchísimo en ese período", explicó Bauer al informar de la duplicación del presupuesto estatal desde la Casa Rosada, sede de Gobierno.
La adquisición de nuevos libros se repartirá entre las 950 bibliotecas que forman parte de la Conabip en todo el país.
Las editoriales que se sumen al programa, por otro lado, se comprometerán a mantener los precios fijados en enero pasado.
La Conabip fomenta la descentralización en la compra de libros de acuerdo a las necesidades específicas de las bibliotecas populares.
El presidente argentino, Alberto Fernández, lanzó en diciembre pasado el Plan Nacional de Lecturas para fomentar este ejercicio entre los diez millones de niños y adolescentes que asisten a la educación primaria y secundaria en todo el país.
