"El Gobierno de México, por medio de las secretarías de Relaciones Exteriores, de Salud y de Marina, repatrió hoy [el 28 de febrero] a tres mexicanos que solicitaron ser trasladados desde Wuhan, República Popular China, con motivo del brote de COVID-19", dijo en un comunicado la oficina del canciller Marcelo Ebrard.
El canciller destacó que contó con el "invaluable apoyo" del Gobierno de Colombia, que transportó a las personas hasta Bogotá y también agradeció y a China por "las facilidades brindadas" a la labor consular.
La ausencia de síntomas fue un requisito sanitario para considerar su repatriación, además del cumplimiento de protocolos sanitarios de China, "incluyendo las medidas de distanciamiento social, durante más de un mes".
Los mexicanos fueron sujetos a "revisiones médicas de salida por autoridades chinas", así como de de autoridades colombianas antes de abordar.
Un médico especialista en bioseguridad y de control de infecciones de las autoridades federales supervisaron el protocolo médico aplicado a los repatriados.
Los mexicanos llegaron "sin presencia de signos, ni síntomas de la enfermedad" hasta su entrega al servicio de sanidad del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
En el aeropuerto entregaron "muestras biológicas para descartar la posibilidad de SARS-CoV-2" para descartar la condición de portabilidad del virus.
El apoyo a estas tres personas se suma al que previamente se otorgó a diez mexicanos más repatriados desde China, "con respeto a sus derechos humanos".
El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que México está preparado para enfrentar el coronavirus, luego de que las autoridades sanitarias confirmaron este 28 de febrero el primer caso en este país, con análisis de laboratorio.
"Estamos preparados para enfrentar esta situación del coronavirus, tenemos los médicos, los especialistas, los hospitales, la capacidad para hacerle frente a este caso del coronavirus", dijo el mandatario en conferencia de prensa.
A nivel internacional, el virus ya infectó a más de 83.700 personas en medio centenar de países y provocó más de 2.850 muertes, la mayoría en la China continental, donde fue descubierto.