"Aquiles sigue recibiendo una comida especial que le está prescrita para controlar el peso, come bien, asiste con regularidad a las actividades que se organizan en guarderías, hospicios y hogares de ancianos, preparándose para las futuras intervenciones en público", dijo.
También reveló que Aquiles se sometió hace poco al examen médico, los galenos constataron el buen estado de su salud.
El felino no se limitó a actuar como oráculo en campeonatos de fútbol, se dedicó al trabajo social en hogares de ancianos y clínicas donde prestan asistencia a los enfermos terminales, revelando talento en felinoterapia.
Según informó Sputnik ya en 2018, Aquiles fue elegido oráculo de la Copa Confederaciones de 2017 gracias a ser un animal con singular resistencia al estrés y un gran amigo de los seres humanos.
Este gato de piel blanca como la nieve nació sordo, quizás por eso desarrolló más intuición, curiosidad y humanitarismo que sus congéneres y mostró una conducta singular que permitía suponer la existencia de una capacidad de analizar y adivinar.
Para hacer una predicción, el gato debía elegir entre dos platos de comida con banderas de dos países.
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La historia de los felinos del Hermitage hunde raíces en el siglo 18, en sus comienzos el emperador Pedro I instaló en el Palacio de Invierno a un gato que trajo de Holanda, después Catalina la Grande, fundadora del Hermitage, otorgó a los felinos el estatus de guardianes de las galerías de pintura del museo.
La tradición de tener gatos en esta pinacoteca se infringió solo en una ocasión, durante el sitio de Leningrado (actual San Petersburgo), después de la II Guerra Mundial fue organizado un servicio de mantenimiento del personal felino en el Hermitage.
