De acuerdo con la Marina de guerra estadounidense, el objetivo de la presencia de su buque en la región es "realizar operaciones de seguridad marítima y mejorar la estabilidad marítima regional".
Por su parte, las embarcaciones de la flota rusa del mar Negro realizará el seguimiento del destructor, mientras la embarcación se encuentre en las aguas de la región.
La maniobra, registrada el pasado 23 de febrero, es la primera de su tipo en el año corriente. En 2019, los buques de guerra de la OTAN, ocho de ellos estadounidenses, realizaron 13 entradas al mar Negro.