En un comunicado, la FUP remarcó que "la orientación es que los petroleros mantengan la huelga y sigan las recomendaciones de los sindicatos en relación a los intentos de intimidación y asedio de los gestores de Petrobras", en referencia a la petrolera semiestatal.
El 17 de febrero, el juez Ives Gandra da Silva Martins Filho, del TST, atendió una petición de los dirigentes de Petrobras y consideró el paro ilegal, autorizando que la empresa tome "medidas administrativas" como corte de salarios, sanciones disciplinarias y despidos.
La decisión no prohíbe la huelga, pero remarca que no puede permanecer como hasta ahora, basándose en una decisión previa del Tribunal Supremo Federal que determinaba que el 90% de los petroleros de Petrobras continuase trabajando durante la huelga.
Brasil | Los petroleros quemaron las cartas de despido. Para la categoría la huelga ya es la de mayor adhesión de los últimos 25 años y no para de crecer. pic.twitter.com/EsQWfY8wU9
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) February 14, 2020
El sindicato informó que recurrirá la decisión del juez del TST, recordando que en noviembre del año pasado, durante otra huelga, este mismo juez también decidió de forma aislada definir el paro como ilegal y después fue derrotado por sus compañeros en la corte.
Según la FUP, este 18 de febrero es el día 18 día de huelga y hay más de 21.000 trabajadores movilizados en más de 120 unidades del sistema Petrobras.
Los petroleros protestan contra la política de la empresa en favor de las concesiones y privatizaciones, la venta de activos considerados estratégicos y decisiones como la de priorizar la explotación de petróleo en lugar de la producción de derivados.
La conservación de los puestos de trabajo es otra de las principales banderas, ya que según la FUP, entre 2013 y 2018 la reducción de trabajadores de Petrobras fue la mayor entre todas las petroleras del mundo, con casi 270.000 destituciones.
