“Hay un desconcierto en materia de transporte internacional por las mercaderías que tienen origen en China”, comentó Furci en diálogo con Sputnik.
Los importadores representados en la CIRA manifestaron “que se están atrasando embarques, que algunas mercaderías no llegan a los puertos porque no hay personal o movimiento terrestre para llevarlos”, indicó el titular de la institución.
“Hay cargas que se están demorando por cuestiones de logística interna y por la necesidad de apostillar y visar diferentes documentos de comercio internacional, pues el movimiento de personas para hacer esos trámites está restringido, ya que la gente tiene un poco de miedo y no se está moviendo”, explicó Furci.
En ese sentido, la CIRA observa “un freno en la actividad” que también se debe a la celebración del Año Nuevo Chino, que fue el pasado 25 de enero, lo que suele trae aparejado un momento de desaceleración económica.
“Si esta situación se extiende en las próximas semanas, sí que va a haber grandes demoras y más preocupación”, advirtió el titular de la CIRA.
Sin patrón común
Mucha carga ha tenido que ser reprogramada, aunque los productos que ya fueron embarcados están saliendo con normalidad, ratificó el gerente.
En ese sentido, los socios de la Cámara no se vieron directamente perjudicados por el cierre de los aeropuertos.
“No tenemos ningún importador que tenga negocios en la ciudad de Huwan, donde está el epicentro de la enfermedad, ni en los alrededores, pues la mayoría de socios embarcan en ciudades más cosmopolitas de la China continental”, informó Furci.
“Cada importador tiene diferentes situaciones: algunos operan con normalidad, otros están atrasados, pero no hay un patrón común, cada situación es diferente según la frecuencia de los embarque, el tamaño del importador y del exportador en origen”, concluyó.
Existente desde hace 111 años, la CIRA representa 1.200 socios representantes de 30 sectores económicos, con 75% de pymes y 40% de empresas industriales, que importan 7.000 millones de dólares anuales en insumos.