El canciller ruso, Serguéi Lavrov, acaba de visitar Cuba, México y Venezuela en una gira por América Latina que volvió a poner de relieve que el relacionamiento entre las dos partes va adquiriendo una importancia geoestratégica.
Las conversaciones que mantuvo con sus contrapartes revelaron una plena coincidencia en que la creciente agresividad norteamericana, manifestada a través de medidas como sanciones unilaterales, necesita una mayor unidad y cooperación.
Señaló, asimismo, que el segmento latinoamericano de la política exterior rusa no solamente tiene dimensión geopolítica, sino que también persigue "enfatizar la dimensión económico-comercial".
Lamentó, en este contexto, que todavía no se haya alcanzado plenamente el "potencial del intercambio económico-comercial entre América Latina y Rusia", pero destacó que sí se están dando avances en esta dirección, habiendo incluso hasta pasos para impulsar negocios entre Latinoamérica y el enorme mercado de la Unión Económica Euroasiática.