Según el Ministerio de Defensa de Turquía, como resultado de los bombardeos de artillería de las fuerzas gubernamentales sirias contra los militares turcos en el norte de Idlib, cinco militares murieron y otros cinco resultaron heridos.
"Cinco nuestros soldados murieron y otros cinco resultaron heridos en un ataque con artillería por parte del régimen sirio en la región de Idlib", dice el comunicado.
A su vez, la Presidencia turca comunicó que Turquía atacó las posiciones sirias desde las que se abrió fuego contra militares turcos en Idlib.
"Se dio una respuesta múltiple a este ataque cobarde, los objetivos enemigos fueron destruidos, la sangre de nuestros soldados no quedó sin venganza", escribió el director del departamento de comunicaciones de la Presidencia turca, Fahrettin Altun, en su cuenta de Twitter.
Turkey retaliated against the attack to destroy all enemy targets and avenging our fallen troops.
— Fahrettin Altun (@fahrettinaltun) February 10, 2020
The war criminal, who ordered today’s heinous attack, targeted the entire international community, not just Turkey.
Agregó que "el criminal de guerra quien emitió esta orden traicionera lo dirigió no solo contra Turquía, sino también contra toda la comunidad internacional".
El 4 de febrero, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, afirmó que había instado a su homólogo ruso, Vladímir Putin, a presionar al Gobierno sirio para que retirara sus tropas de los puestos de observación turcos en Idlib, amenazando en caso contrario con una respuesta militar.