"No son más que especulaciones", afirmó Uliánov, refiriéndose a las conjeturas que circulan al respecto en la prensa internacional.
Para el diplomático ruso, "ahora no hay ningún motivo para preocuparse".
Uliánov reconoció que Irán "se desvió algo de sus compromisos" contraídos en el acuerdo de salvaguardias con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), pero fue principalmente antes de 2003, sin que se haya registrado violación alguna después de 2009.
Habida cuenta de que el OIEA no ha publicado ningún informe desde que Irán anunció otro recorte de sus compromisos con el PAIC a principios de enero, "podemos sacar la conclusión de que no hay cambios sobre el terreno", dijo Uliánov.
En julio de 2015, Irán y el E3/UE+3 (Alemania, Francia, el Reino Unido, la Unión Europea, China, Estados Unidos y Rusia) firmaron el PAIC que impuso una serie de limitaciones al programa nuclear iraní para excluir su posible dimensión militar, a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales.
En mayo de 2018, EEUU abandonó el acuerdo y empezó a imponer sanciones contra Irán, al que acusó de seguir desarrollando armas nucleares.
La Unión Europea adoptó a finales de enero de 2019 el Instrumento de Apoyo a los Intercambios Comerciales (Instex) para eludir las sanciones estadounidenses y comerciar con Irán.
El 5 de enero, Irán renunció a la "última limitación clave" prevista en el PAIC, la del número de centrifugadoras, pero aseguró que seguirá cooperando con el Organismo Internacional de Energía Atómica como antes, y está listo para retomar el cumplimiento de las obligaciones si se levantan las sanciones en su contra.
El 14 de enero, Alemania, Francia y el Reino Unido manifestaron en una declaración conjunta su rechazo a los argumentos que Irán había alegado para desvincularse del PAIC y activaron el mecanismo de resolución de disputas previsto en el acuerdo.
A principios de febrero, el presidente iraní, Hasán Rohaní, afirmó que Teherán podría revisar su colaboración con el OIEA si cambian las circunstancias.