"Esto genera una gran inquietud, pero no porque veamos una amenaza para nuestra seguridad. Nuestra seguridad nacional es sólida", dijo Riabkov al comparecer ante la prensa.
El 4 de febrero, el secretario adjunto de Defensa para Política de Estados Unidos, John Rood, reconoció que su país estaba desplegando las ojivas nucleares W76-2 en sus submarinos.
"El emplazamiento de ojivas nucleares de baja potencia en los vectores estratégicos significa que el razonamiento de los estadounidenses, en términos declarativos, sobre el posible uso de armas nucleares en un hipotético conflicto, ahora se hace realidad", sostuvo Riabkov.
Los estadounidenses, subrayó, "disminuyen el umbral nuclear y se permiten llevar a cabo una guerra nuclear limitada".
En este contexto, el vicecanciller ruso llamó a la comunidad internacional a frenar el comportamiento peligroso de Washington en el ámbito nuclear.
"Necesitamos redoblar los esfuerzos para contener la deriva de Estados Unidos hacia un rumbo peligroso", remarcó.
Riabkov instó también a evitar que Washington planifique "escenarios catastróficos absolutamente inaceptables" para el mundo.