Su nombre real era Oscar Seborer, y, aunque fue descubierto originalmente en 1956 o antes, los documentos sobre él no fueron desclasificados hasta 2019, informa The New York Times. Sin embargo, aquellos documentos no desvelaban el nivel de implicación de Seborer en el espionaje: "Solo sabemos que Seborer proporcionó algo". Sin embargo, los papeles desclasificados de la CIA muestran que era uno de los informantes clave de los soviéticos.
"Es fascinante. No teníamos ni idea de que fuera tan importante", dijo Klehr a The New York Times.
Los otros tres espías que trabajaron para Moscú eran Klaus Fuchs, David Greenglass y Theodore Hall. Seborer y su familia se mudaron a la URSS en 1951, pero desde 1945 —tras terminar la Segunda Guerra Mundial— ya había trabajado en Los Álamos. Junto a los tres espías previamente desenmascarados compartía con los líderes soviéticos suculenta información sobre una tecnología conocida como dispositivo de implosión.
I don't recall Jesus saying "The #Russians ye shall always have with you."
— RC deWinter (@RCdeWinter) January 29, 2020
"Last fall, a pair of historians revealed that yet another #Soviet #spy, code named Godsend, had infiltrated the Los Alamos laboratory where the world’s first atom bomb was built."https://t.co/sCNJlFqu2K
¿Qué es un dispositivo de implosión?
Las primeras bombas atómicas, incluida la que Estados Unidos lanzó sobre Hiroshima en 1945, utilizaron una tecnología explosiva más primitiva y menos eficiente llamada dispositivo de rifle, en la que un fragmento de uranio impacta contra otro fragmento del mismo material para causar una reacción. En cambio, el dispositivo de implosión usa una sofisticada cadena de pequeños explosivos que rodean a un núcleo de plutonio y desencadenan una reacción nuclear. De esta forma, requiere mucho menos combustible y, por tanto, es infinitamente más barato.
Los soviéticos probaron un dispositivo de implosión en su bomba atómica apenas cuatro años después, en 1949, y no podrían haberlo hecho sin la tecnología estadounidense. Los diagramas encontrados en sus archivos desclasificados muestran dibujos y esquemas de circuitos de implosión con etiquetas tanto en inglés como en ruso. Los expertos creen que todas ellas son fruto del espionaje en Los Álamos.
En 1951, Oscar Seborer huyó de EEUU a la URSS con su hermano, su cuñada y su suegra, y empezó a vivir en Moscú con el apellido de Smith.