En el caso de México, López Obrador pronosticó, en su conferencia de prensa diaria, que "nos va a apoyar mucho para que sigan llegando inversiones para que se sigan ampliando empresas, se creen nuevas empresas, se creen empleos, mejoren los salarios y haya bienestar", afirmó el presidente en su conferencia de prensa diaria sobre el T-MEC [Tratado entre México, EEUU y Canadá].
López Obrador añadió que México no ha "tenido problemas en la relación económica y comercial con EEUU, solo aquel incidente de junio del año pasado, que se resolvió bien".
En aquella ocasión, Trump amenazó con imponer aranceles de hasta 25% a las importaciones procedentes de México, si las autoridades de este país no contenían el éxodo de centroamericanos, que huyen de la violencia y la pobreza a pedir asilo en la frontera sur de EEUU.
"Ha habido una relación de respeto mutuo entre el Gobierno de EEUU y de México, es un buen pronóstico para la economía del país", afirmó el mandatario.
Por su parte, la secretaria de Economía, Graciela Márquez, quien asistió a la ceremonia celebrada en la Casa Blanca, comentó junto al presidente que la potencia económica vecina es el más importante para el comercio exterior mexicano.
Las cifras mexicanas de comercio exterior reflejan la concentración en el mercado estadounidense, acumulando más del 80% de las ventas totales.
El Gobierno de México señaló que la economía de Norteamérica es "la más importante del mundo", con más de 22,2 billones de dólares de Producto Interno Bruto y más de 490 millones de habitantes.
