A pesar de que en Francia ya se confirmaron seis casos de contagio del virus 2019-nCoV, procedente de China, se puede ver un gran número de chinos en los boutiques de la capital francesa.
Una dependiente de los grandes almacenes parisinos Galeries Lafayette, cuya historia se remonta al siglo 19, comentó a Sputnik que los chinos tradicionalmente benefician a las ventas del centro.
"Aquí siempre hay muchos turistas de China, sobre todo ahora, que continúan los descuentos; no he notado en absoluto que disminuyera el número de compradores chinos", dijo.
Una vendedora de una tienda de una marca italiana señaló que el número de clientes se ve afectado más por la huelga indefinida contra la reforma francesa de las pensiones que por el brote del virus.
Las masivas protestas empezaron en Francia a principios de diciembre pasado y en varias ocasiones paralizaron el transporte público en todo el país.
"Las noticias del coronavirus no provocaron la caída de compradores, pero durante la huelga sí que se redujo el número de clientes", indicó la empleada.
Mientras, en el lujoso barrio de Knightsbridge en Londres se observa animación y muchedumbre por las nuevas colecciones en las tiendas de moda.
"No vemos una reducción de compradores de China, son muchos como siempre", comentó una vendedora de la marca italiana de joyas de lujo BVLGARI, en la calle comercial Sloane Street, aledaña a Knightsbridge.
En la boutique Louis Vuitton comentaron a Sputnik que "nada ha cambiado por el coronavirus, nadie lleva máscaras".
Un empleado de una tienda de Chanel confirmó que no hay pánico entre los clientes.
"Los clientes no llevan máscaras, nosotros tampoco. He escuchado que los turistas de China las compran aquí, en el Reino Unido, para llevarlas luego a su país, porque están en déficit por el brote" del virus, contó.
Un representante de la marca de joyas británica Graff expresó: "Nos encantan los compradores de China, ¿qué haríamos sin ellos? Ojalá las autoridades y doctores en China venzan este coronavirus lo más pronto posible y que se recuperen los infectados".
Las autoridades de China pusieron en cuarentena vastas zonas con decenas de millones de habitantes para contener la propagación del virus, mientras que otras naciones restringieron enlaces de transporte con el país asiático.