El canciller ruso hizo esta declaración en Colombo, el primer destino de su gira asiática que emprendió inmediatamente después de las consultas interlibias.
Rusia seguirá adelante con los esfuerzos para que se normalice la situación en Libia, aseguró el jefe de la diplomacia rusa:
"Rusia trabaja para que las partes libias demuestren la misma responsabilidad (que las del conflicto sirio) por el destino de su país. Todos nosotros actuamos en la misma dirección y alentamos a todas las partes libias a llegar a un acuerdo en vez de continuar arreglando las cosas mediante el uso de la fuerza", puntualizó el canciller ruso.
El 13 de enero, Moscú acogió las consultas sobre Libia promovidas por Rusia y Turquía en las que participaron el jefe del Gobierno de Unidad Nacional, Fayez Sarraj, y el comandante del Ejército Nacional Libio (ENL), el mariscal Jalifa Haftar.
El Ministerio de Defensa de Rusia señaló que Haftar dio visto bueno al borrador del acuerdo sobre el cese del fuego pero pidió 48 horas para debatirlo con los jefes tribales.
Haftar posee fuerza política real y, obviamente, para el mariscal cambiar su actual poder y fuerza para entregar el poder a Sarraj es inadmisible, considera el experto ruso Leonid Krutakov:
"En general, todos los hechos que tienen lugar en Oriente Próximo son, a mi parecer, una tentativa de subjetivación política de Europa, que procura abastecerse de energía al margen de EEUU. Muestra de ello son tanto los sucesos sirios como los hechos relacionados con el gasoducto Nord Stream", indicó el experto.
En el marco de un encuentro es imposible resolver todo el conjunto de problemas que componen hoy la crisis libia, estima otro experto ruso, Grigori Lukiánov:
Por su parte, el experto chileno en temas internacionales Nicola Hadwa, dijo lo siguiente:
"Para que haya realmente paz en Libia y para que ese Estado se reconstruya y vuelva a ser un Estado estable que era antes de la invasión de la OTAN, deben salir todas las fuerzas extranjeras de la zona y dejar que los libios previa elaboración de una verdadera Constitución política que permita una verdadera democracia, el pueblo libio debe decidir en su interior lo que ellos consideran mejor para su existencia, libre de la presión extranjera y de las injerencias".
Mientras tanto, la policía de Teherán desmintió la información de disparos realizados a manifestantes el 11 de enero, cuando centenares de estudiantes se congregaron frente a la sede de la Universidad Amir Kabir, de la capital iraní, para honrar la memoria de los que perecieron en la catástrofe del avión ucraniano de pasajeros.
El jefe de la policía de Teherán, Husein Rahim, cuyas palabras son citadas por la agencia RBK, declaró:
"Durante las acciones de protesta, la policía capitalina no realizó un solo disparo debido a que se había ordenado a sus efectivos guardar la calma".
El experto ruso Alexéi Podberiozkin admite que EEUU está recurriendo a todos los métodos para sembrar la división en la sociedad iraní:
"Estoy seguro de que no solo las redes sociales están siendo activamente empleadas por los norteamericanos en Irán, sino también su red de agentes. (…) Pues, pienso que en el caso de Irán esta va a ser una tarea difícil de cumplir. La sociedad iraní es suficientemente monolítica, en la que es muy poderoso el sistema de los valores nacionales".
En otro orden, la primera parte del acuerdo comercial entre EEUU y China incluye el compromiso de Pekín a comprar artículos norteamericanos de cuatro ramas por un valor de alrededor de 200 mil millones de dólares en el curso de 2 años, comunica el diario South China Morning Post.
Se espera que esta semana quede firmada la primera fase del acuerdo. El líder estadounidense, Donald Trump, ya había declarado que EEUU en el acto iniciará las negociaciones con China sobre la segunda fase del acuerdo.
El politólogo ruso Andréi Gubin no considera que China sea la parte perdedora en dicha transacción:
"Es muy difícil doblegar a Pekín. El gigante asiático se caracteriza por su postura blanda que toma en consideración varias líneas por las cuales se pueden desarrollar las negociaciones. Por eso pienso que si China acepta algo es muy probable que ya haya calculado las ventajas".
A mediados de diciembre China y EEUU anunciaron la concertación del texto de la primera parte del acuerdo comercial. En el marco del mismo, las partes acordaron no establecer los nuevos aranceles que debían regir a partir del 15 de diciembre.
Estos y otros temas podrán escuchar con más detalle en la presente edición de El Punto.