"Un buen socio siempre entiende las necesidades del otro", dijo en declaraciones recogidas por el portal UOL, y añadió: "De la misma forma que Brasil no presionó a EEUU sobre qué negocios hacer con China y cómo eso afecta a nuestra agricultura".
El ministro afirmó que no existe veto a ninguna empresa y que la elección será absolutamente técnica: "Con criterios técnicos, difícilmente alguna de esas grandes empresas no tendría condiciones de participar", afirmó.
La subasta para implantar la velocidad 5G ya se había aplazado al segundo semestre de 2020, pero lo más probable es que pase a 2021, debido a un problema técnico de interferencia del 5G en la frecuencia de las antenas parabólicas que transmiten la señal de televisión vía satélite.
El ministro restó importancia a la demora y afirmó que Brasil puede aprender con los errores de otros países que ya implantaros el nuevo sistema, además de fortalecer la seguridad cibernética interna.