"Si Tallin dispone de pruebas de incongruencia entre la actividad de la oficina Sputnik [Estonia] y los fines declarados, que las presente públicamente, y si no las hay, como siempre resulta, entonces debe disculparse por las calumnias", dijo Zajárova.
También calificó de "inadmisibles y absolutamente infundadas" las declaraciones de las autoridades estonias de que la agencia es "una unidad para operaciones de información".
La portavoz diplomática rusa expresó su preocupación por el rechazo de las autoridades estonias de aceptar las recomendaciones del representante para la libertad de prensa de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), Harlem Désir.
El 21 de diciembre pasado, Désir llamó a las autoridades de Estonia a abstenerse de imponer restricciones innecesarias al trabajo de Sputnik.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Estonia, Urmas Reinsalu, declaró que el país aplicó las sanciones de la Unión Europea (UE) a la propiedad de Sputnik, y no se trata de restricciones algunas en relación con el trabajo de la agencia.
Las autoridades estonias justifican su exigencia con las sanciones impuestas por la UE el 17 de marzo de 2014 contra varias personas y entidades a la luz de los acontecimientos en Ucrania.
Rossiya Segodnya, a su vez, insiste en que no figura en ninguna lista de sanciones de la UE.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia manifestó su indignación por el hostigamiento de la agencia y pidió una reacción inmediata de las estructuras internacionales.
El presidente ruso, Vladímir Putin, calificó el acoso a Sputnik Estonia de "una manifestación de cinismo".