"Se hizo una valoración positiva de los resultados de la cumbre celebrada en París el 9 de diciembre en el formato de Normandía, durante la cual se acordaron pasos para implementar los Acuerdos de Minsk, que son una base indiscutible de la solución del conflicto en el sudeste de Ucrania", dice el comunicado.
El Cuarteto de Normandía y el Grupo de Contacto Trilateral (Rusia, Ucrania y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa) son las principales plataformas de consultas que buscan resolver la crisis en el este ucraniano.
Desde abril de 2014 Ucrania lleva a cabo una operación contra las milicias en el este de su territorio, donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk en respuesta al violento cambio de gobierno ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.
Seguridad energética de la UE
Además, los líderes de Rusia y Alemania discutieron el tema de la seguridad energética de los países de la UE, informó el servicio de prensa del Kremlin.
Añade que las partes acordaron mantener los contactos a diferentes niveles.
El presidente ucraniano Volodímir Zelenski, en la rueda de prensa final de la cumbre del Cuarteto de Normandía, afirmó que el encuentro permitió desbloquear el asunto del tránsito del gas ruso por el territorio ucraniano.
El contrato entre la rusa Gazprom y la ucraniana Naftogaz para la venta del gas ruso a Ucrania y su tránsito por territorio ucraniano a la Unión Europea expira el 31 de diciembre de 2019.
Se oponen al proyecto Ucrania, que teme perder sus ingresos por el tránsito del gas ruso, y algunos países europeos como Polonia, Letonia y Lituania.
También expresó su recelo Estados Unidos que busca vender a Europa gas natural licuado de sus yacimientos de esquisto.
Escalada en Libia
Putin y Merkel también abordaron la crisis en Libia y subrayaron la necesidad de evitar una escalada de tensiones.
"La mayor atención se prestó a los problemas de la crisis libia, se subrayó la necesidad de evitar un mayor agravamiento de la situación y reanudar el diálogo de paz", dice el comunicado.
Libia continúa sumida en una crisis desde que el derrocamiento de su líder histórico, Muamar Gadafi, en 2011, derivó en violentos enfrentamientos entre facciones rivales.
Actualmente en el país hay una dualidad de poderes: el Gobierno interino, que controla la parte oriental del país junto con el Parlamento, y el Gobierno de unidad nacional en Trípoli (oeste), avalado por la ONU.