Las encuestas otorgan una intención de voto de 43 % para el oficialismo, mientras que el Partido Laborista, liderado por Jeremy Corbyn, rondaría el 30 %. En 2017, la por entonces primera ministra Theresa May convocó a elecciones para intentar aumentar su bancada y destrabar el freno parlamentario al Brexit.
Esto determinó que no se pudieran cumplir ninguna de las fechas fijadas para el Brexit. Ni la original del 29 de marzo de 2019, ni la primera prórroga del 12 de abril y tampoco la del 31 de octubre. La nueva fecha límite que le concedió la Unión Europea (UE) fue el 31 de enero de 2020.
"El resultado de la selección todavía está abierto", aseguró a Sputnik Nicolás Pose, docente e investigador del Programa de Estudios Internacionales de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República de Uruguay. "Básicamente pueden presentar dos grandes escenarios", acotó.
En uno de ellos los conservadores obtienen la mayoría parlamentaria y en el otro, el más probable, es que "ganen pero que no sea suficiente para controlar por sí solo al Parlamento".
"Uno espera que con un Partido Conservador con mayoría parlamentaria propia Johnson tenga una fortaleza interna mucho mayor para llevar sus demandas a Europa y negociar mejor", apuntó el académico uruguayo.
"En cambio, si nos enfrentamos nuevamente a un Parlamento dividido en el cual el Gobierno tenga que buscar alianzas con socios que no parecen muy alineados a la propuesta conservadora para la relación con la UE pos-Brexit, en ese escenario el bloqueo puede llegar a ser una realidad nuevamente", apuntó.
Sin alianzas para el divorcio... ni la continuidad
"Las predicciones muestran que los conservadores aumentarán su bancada, pero lo que no sabemos todavía es el margen de ese aumento", señaló Pose.
En este contexto surge como tercero en discordia el partido Liberal Demócrata, que marca 15 % de intención de voto. Su líder, Jo Swinson, plantea revocar el artículo 50, lo que significa que el Brexit no se daría en ninguna circunstancia.
Dicho artículo figura en el Tratado de la Unión Europea y establece que "todo Estado miembro podrá decidir retirarse de la Unión de conformidad con sus propios requisitos constitucionales".
"Los Liberales Demócratas pueden llegar a tener alguna coincidencia con respecto al Brexit con los laboristas, pero en todo lo demás es muy difícil que puedan tener acuerdos (...) tienen profundas divergencias con Corbyn por ejemplo en cuál puede ser el rol del Estado en la economía", indicó el investigador, al dar por tierra la posibilidad de un Gobierno de coalición entre la segunda y tercera fuerza política.
El entrevistado recordó que tras la fecha de salida del bloque del 31 de enero de 2020 "se abre un nuevo período de transición de un año en cual ambas partes tienen que acordar cómo van a ser las relaciones futuras. Y es ahí, en esa nueva negociación, que podemos esperar buena parte de las rispideces y conflicto, ya sea al interior de Reino Unido o en las relaciones con la Unión Europea".