"Hemos apoyado decididamente la operación Fuente de Paz, porque cumple para nosotros el objetivo estratégico de unidad de los territorios sirios y de regreso del mayor número posible de los refugiados sirios a los lugares de su residencia y representa en sí un elemento positivo que contribuye a la solución política de la crisis y a la transición política en Siria", señaló.
Reveló que la delegación planea reunirse con el enviado especial del secretario general de la ONU, Geir Pedersen, durante las negociaciones en la capital kazaja y tratar el tema del Comité Constitucional.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a facciones armadas de la oposición y a grupos terroristas.
Para normalizar la situación se sostienen desde 2017 negociaciones el "en formato de Astaná" (nombre antiguo de la capital de Kazajistán, hoy llamada Nur-Sultán) patrocinadas por Rusia, Turquía e Irán.
El 22 de octubre, Rusia y Turquía firmaron un memorando de entendimiento de 10 puntos, en particular sobre el despliegue de policías militares rusos y guardias fronterizos sirios en el norte de Siria, pero fuera del área en que operan las tropas turcas.