Distintas dependencias federales mexicanas acordaron "iniciar un proceso de colaboración en materia de seguridad para detener el flujo ilícito de armas y explorar mecanismos de cooperación para el intercambio de información", dijo la cartera en un comunicado.
Para la nación latinoamericana, esta colaboración significará, entre otras ventajas, la posibilidad de "generar un compromiso para el flujo expedito de información sobre la trazabilidad de armas entre el Gobierno de México y los países referidos, como principales países europeos de origen de las armas aseguradas que ingresan a EEUU y a México".
Los resultados de esa cooperación formarán parte de la estrategia de México a nivel global para detener el tráfico ilícito de armas, como una de sus prioridades en materia de combate al crimen organizado y el narcotráfico, uno de sus principales temas de negociación con el país vecino.
Asimismo, buscan generar una red de cooperación internacional entre sus autoridades policiales "enfocada en el desarrollo de estrategias de inteligencia para disminuir los índices de tráfico de armas".
México y la UE buscan además promover la "ratificación universal de los instrumentos internacionales" en materia de combate al tráfico ilícito de armas.
Las autoridades mexicanas, país en que las armas están prohibidas, estiman que cada año ingresan unas 200.000 armas de distinto calibre en forma ilícita, de las cuales un 70% proceden de EEUU, donde la compraventa de armamento es legal y está regulado.