"La industria turística sufre daños. Antes comenté que las reservas de hotel se mantenían a un nivel del 80%, y ahora solo es un 6%. La caída será del 80 o el 85%", dijo Guidanian en una entrevista con Sputnik.
Comentó que la crisis económica y las posteriores manifestaciones antigubernamentales en el Líbano fueron la causa del cierre de más de 250 restaurantes y bares y dijo que esa cifra puede aumentar hasta 400.
"Se cerró un gran número de restaurantes, podría llegar a unos 400 restaurantes y bares. Ya se cerraron 265 establecimientos, resultado de la falta de turistas y del descenso del poder adquisitivo de la población", refirió Guidanian.
Recordó que el sector turístico mantenía viva a la economía nacional.
"Ese sector le daba la vida a la economía libanesa. Nosotros por ahora no tenemos petróleo y nuestra industria y agricultura están subdesarrolladas. Solo el turismo estaba desarrollándose y era capaz de atraer divisas al país", apuntó el ministro.
Al mismo tiempo destacó que los disturbios no afectan la seguridad de los turistas que se encuentran en el Líbano.
"En comparación con las protestas acompañadas de saqueos en otros países, aquí la intensidad de los disturbios que continúan ya durante 40 o 45 días es bastante baja […] y podemos aseverar al turista extranjero que nada amenaza a la seguridad en el país", indicó Guidanian.
"Pero vuelvo a decir que desde el punto de vista de la seguridad lo tenemos todo bajo control, y todos entienden que cualquier violación a la paz puede desencadenar una guerra civil y nadie en Líbano ni fuera del país está interesado en la desestabilización", subrayó el ministro interino de Turismo.
Las protestas antigubernamentales comenzaron en el Líbano el 17 de octubre y continúan desde hace más de 40 días pese a la dimisión del Gobierno.
Los manifestantes siguen ejerciendo presión sobre los dirigentes del país, exigiendo formar un nuevo gabinete de ministros y efectuar eficaces reformas políticas y económicas.