Aunque Abrams no especificó cuándo firmaron el contrato las partes, el exconsejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton, había hablado de lo mismo en su cuenta de Twitter en junio del 2019.
"En mayo, mientras cientos de venezolanos pasaban hambre, Maduro pagaba a Rusia 209 millones de dólares por un contrato de defensa para comprar su continuo apoyo. Los venezolanos quieren un liderazgo democrático y no la represión", escribió en aquel entonces Bolton en su cuenta en Twitter.
Según Washington, la adquisición de los modernos Su-35S ayudaría a Venezuela a expandir su flota de varias docenas de Su-30MK2 que había comprado a Rusia durante el Gobierno de Hugo Chávez. La sofisticación de los sistemas aéreos existentes de Venezuela sirve como un medio disuasivo contra los posibles ataques de EEUU, escribe el portal Military Watch.
Venezuela, que tiene uno de los mayores Ejércitos y opera la flota más capacitada de cazas de toda América sin contar con EEUU, se ha visto amenazada en repetidas ocasiones por los ataques aéreos. Varios medios de comunicación reportaron también que el país caribeño planeaba sustituir los F-16 estadounidenses de la época de la Guerra Fría por dos docenas de unidades de Su-35S, bajo un contrato estimado en 2.000 millones de dólares.