"Recomendamos a aquellos extranjeros que están llegando al país hechos 'mansas palomitas' tratando de incendiar el país, que anden con cuidado, los estamos mirando, los estamos siguiendo, estamos viendo lo que están haciendo", dijo el ministro de Gobierno, Arturo Murillo.
El ministro, hombre fuerte del Gobierno de facto de Jeanine Áñez, hizo la advertencia en un discurso de presentación de un plan policial denominado Todos por Bolivia, que según dijo pretende frenar especialmente los delitos de narcotráfico y terrorismo, de los cuales responsabilizó al Gobierno del derrocado presidente Evo Morales.
"En el primer paso en falso que den tratando de hacer terrorismo, sedición, se van a ver con los policías. La Policía está atenta y tiene orden para no permitir que se dañe a nuestro país; nosotros tenemos que cuidar a once millones de bolivianos", afirmó el ministro.
No era la primera advertencia de Murillo contra supuestos terroristas extranjeros, incluidos argentinos, cubanos y venezolanos, a quienes acusó de participar en las protestas que siguieron a la autoproclamación del Gobierno de Áñez, el 12 de noviembre.
En posterior diálogo con reporteros, Murillo confirmó que una recién creada unidad policial de lucha contra el terrorismo, presentada el 28 de noviembre en Santa Cruz, era parte del plan Todos por Bolivia.
La Policía, cuyo amotinamiento precipitó la caída de Morales, ha pedido al Gobierno de facto que iguale sus salarios con los de las Fuerzas Armadas.