En un comunicado, el COI señaló que el reciente informe del Departamento de Inteligencia e Investigaciones de la WADA, en el que la agencia basó sus últimas recomendaciones, indica que cualquier manipulación de datos en el laboratorio antidopaje de Moscú "es únicamente responsabilidad de las autoridades rusas", que debían "preservar la integridad" de esos datos.
"En este contexto, el COI saluda la oportunidad ofrecida por la WADA a los atletas rusos a competir, siempre y cuando puedan demostrar que no están implicados de ninguna manera en el incumplimiento" de las normas antidopaje.
El COI enfatizó además que "apoyará las sanciones más duras contra todos los responsables de esas manipulaciones" y reiteró su solicitud a las autoridades rusas para que "presenten los datos brutos en los cuales está basado este caso".
Por su parte, el ministro de Deporte de Rusia, Pável Kolobkov, lamentó que la posición de expertos rusos no se haya tomado en cuenta en las recomendaciones del Comité de Revisión y Cumplimiento de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA) sobre los atletas rusos.
"Desgraciadamente, la posición de nuestros expertos no se tomó en cuenta y se aprobaron estas recomendaciones", dijo Kolobkov.
El ministro indicó que la decisión del Comité Ejecutivo se basará en este informe pero, en su opinión, "es prematuro hablar de que el Consejo de Fundadores aplicará todas las sanciones".
También aseguró que Rusia cumplió honestamente con sus compromisos y presentó toda la información necesaria a la WADA.
Igualmente se cumplieron todos los compromisos establecidos por la hoja de ruta antidopaje elaborada junto con el Consejo de Europa en 2015, añadió el ministro al subrayar que los laboratorios rusos son totalmente independientes del Ministerio de Deporte.
Por último, Kolobkov afirmó que Rusia está interesada "más que nadie" en que "termine toda esta historia y que los deportistas rusos puedan competir en las mismas condiciones con otros atletas y que acaben las acusaciones de manipulaciones".
En noviembre de 2015, la WADA acusó a Rusia de numerosas infracciones de las reglas antidopaje y suspendió a la Rusada.
En diciembre de 2017, el Comité Olímpico Internacional (COI) prohibió a la selección rusa participar en los Juegos Olímpicos de 2018 en Pyeongchang bajo la bandera nacional, pese a no haber encontrado pruebas del llamado "dopaje institucional", del que se acusó a Rusia.
El 20 de septiembre de 2018, el Comité Ejecutivo de la WADA decidió restablecer como miembro a la Rusada con varias condiciones, entre ellas proporcionar antes de fin de 2018 pleno acceso a su laboratorio antidopaje en Moscú.
Rusia proporcionó el acceso al laboratorio en Moscú en enero de 2019, cuando consiguió certificar los equipos de los expertos de la WADA según la legislación rusa, y desde entonces la Agencia Mundial Antidopaje continúa la investigación de los datos del laboratorio ruso.
En septiembre pasado, la WADA lanzó el procedimiento para hacer constar que la Rusada no corresponde al Código Mundial Antidopaje después de que se denunciaran manipulaciones con los datos del laboratorio antidopaje en Moscú.