Ultima Thule era el nombre de Arrokoth, una palabra nativa americana que significa "cielo". El nombre anterior era un término latino que metafóricamente significa "un lugar más allá del mundo conocido".
Hasta el martes 12 se lo conocía como Ultima Thule, aunque no estaba registrado en la Unión Astronómica Internacional ni en el Centro de Planetas Menores, que tiene autoridad internacional para nombrar los objetos del cinturón de Kuiper. Su nombre oficial era el impersonal "Kuiper belt object 2014 MU69".
El término latino Ultima Thule era el utilizado en la antigüedad clásica para designar tierras lejanas y desconocidas, en particular las que eran frías, como los países nórdicos. Esa conexión con el norte de Europa llamó la atención de los nazis.
"Thule fue uno de los nombres que le dieron a lo que ellos creían era la antigua patria aria, una utopía aria prehistórica que colapsó debido a un mestizaje racial o una inundación o lo que sea", dijo a New York Times Eric Kurlander, profesor de historia de la Universidad Stetson en DeLand, Florida.
Según contó el científico Mark Showalter a Newsweek, el nombre fue sugerido en línea por aproximadamente 40 personas durante el proceso de nombramiento. El equipo de la nave espacial no tripulada Nuevos Horizontes, que fotografió al objeto por primera vez, se enteró de la connotación nazi del término durante el proceso de nombramiento, pero decidió seguir adelante de todos modos.
La directora de la división de ciencias planetarias de la sede de la Nasa, Lori Glaze, dijo a New York Times que el nuevo nombre fue elegido para honrar la herencia de la región de Chesapeake Bay, donde se encuentra la misión Nuevos Horizontes. Se negó a comentar al periódico estadounidense sobre la controversia en torno al nombre de Ultima Thule.
"Los (antiguos) nombres temporales y permanentes no están relacionados -el equipo eligió la palabra argelino/powhatan para'cielo' -Arrokoth- como tributo a los pueblos indígenas de la región de Chesapeake", dijo Glaze.