El suceso se produjo el 11 de noviembre cuando un hombre de 23 años irrumpió en el establecimiento y roció con la sustancia química a los niños y a los maestros.
Según la Policía, el agresor padece problemas psicológicos desde la niñez por el divorcio de sus padres.
La condición de dos de los lesionados es grave pero no reviste riesgo de muerte, comunicó la agencia Xinhua.