"Esperamos que todos los observadores externos se abstengan de comentarios poco productivos y permitan que los venezolanos se pongan de acuerdo entre ellos", dijo la diplomática en una rueda de prensa.
Para la portavoz, la situación en Venezuela "sigue siendo tensa", existen fuerzas opositoras que "mantienen un espíritu radical y no dejan los intentos de caldear la situación en las calles".
Cabello: oposición venezolana ayuda al Gobierno si no participa en parlamentarias 🇻🇪
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) November 7, 2019
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"Para mediados de noviembre están previstas unas acciones de protesta de turno que abarcarán todo el territorio de Venezuela, mientras el Gobierno y la oposición constructiva continúan su labor en el marco de la llamada mesa redonda del diálogo nacional", subrayó.
La representante de la Cancillería rusa indicó que ellos debaten "problemas políticos, económicos, los problemas electorales, incluidas las cuestiones relacionadas con la realización el año próximo de las elecciones parlamentarias".
"Surgen indicios esperanzadores de que la opositora Asamblea Nacional se está involucrando cada vez más en ese proceso, ya que con la participación de sus diputados fueron logrados acuerdos sobre la renovación conjunta del Consejo Nacional", destacó la diplomática.
En este contexto, afirmó que en el "frente internacional" continúa a toda marcha una "labor de minado" que tiene como objetivo "impedir al precio que sea una estabilización de la situación política interna en Venezuela". La diplomática indicó como un ejemplo "las sanciones ilegales unilaterales" que la Casa Blanca pone en marcha de manera habitual, "persiguiendo un propósito que no se oculta, que consiste en derrocar el Gobierno de Venezuela, legalmente elegido".
"En su afán de imponer restricciones, Washington está empezando ya, por el menor intento de tratar de establecer unas relaciones constructivas con Caracas, a amenazar a sus propios aliados", denunció.
La representante de la Cancillería rusa expresó al mismo tiempo su satisfacción ante la declaración del Grupo de Contacto por Venezuela, publicada el 1 de noviembre, en la que queda reflejado "de manera incuestionable" el derecho de los propios venezolanos a determinar el futuro de su país.
"Ya en más de una ocasión hemos dicho que la imposición de ciertas condiciones a una de las partes del conflicto político en Venezuela, y en general en cualquier lugar del mundo, no favorece al proceso de reconciliación nacional, al inicio de un diálogo, ni al hallazgo de compromisos que permitan superar una crisis" recalcó.
Para la portavoz, la tarea de la comunidad internacional consiste en "ayudar a encontrar el entendimiento mutuo entre las diferentes fuerzas políticas de Venezuela".
