La especialista del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) explicó que, a diferencia de los estados de coma, en la muerte encefálica la recuperación es imposible, pese a que la mayor parte de los órganos del cuerpo siguen funcionando y también, con la asistencia de medicamentos y aparatos, algunas funciones vitales como la respiración.
Comentó que en la Clínica de Especialidades Neuropsiquiátricas del ISSSTE, donde labora, tanatólogos, psicólogos y psiquiatras intervienen en el diálogo con familiares para sensibilizarlos sobre las implicaciones de ese estado clínico y para hablarles de la posibilidad de donación de órganos, pues los pacientes con muerte cerebral suelen ser potenciales donantes.
"Es difícil para la familia aceptar que el paciente ya no va a responder y también hablar con ellos sobre la donación de los órganos porque están pasando por un duelo, pero es necesario hacerlo, siempre con mucha sensibilidad, porque su decisión puede salvar muchas vidas", mencionó en entrevista con Notimex.
La también especialista en trastorno del movimiento y enfermedad de Parkinson precisó que, aunque a nivel mundial la principal causa de muerte cerebral es el traumatismo craneoencefálico producido particularmente por accidentes, también pueden conducir a este estado los paros respiratorios, los eventos vasculares o los infartos cardíacos y cerebrales, entre otros.
Una vez confirmado el diagnóstico y en los casos en los que se consienta la donación, el paciente con muerte cerebral es llevado a cuidados intensivos y de inmediato se establece el contacto con los diferentes hospitales para determinar el destino de los órganos, detalló la neuróloga Lorena Zuazua.
El descanso puede no ser bueno tras sufrir una lesión cerebral https://t.co/NW6eN36ifb pic.twitter.com/khZ5PQS1Ve
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 18 сентября 2018 г.
Sobre la diferencia entre la muerte cerebral y el estado de coma, expuso que, pese a no responder a ningún estímulo externo, los pacientes en coma preservan los reflejos del tallo cerebral, encargado entre otras de coordinar la respiración, la función cardíaca y la presión arterial.
La tarde del 1 de noviembre la Secretaría de Salud del Estado de México declaró con muerte cerebral al alcalde de Valle de Chalco, Francisco Tenorio Contreras, quien el 5 de noviembre sufrió un atentado en la unidad habitacional Geovillas la Asunción, de ese municipio, donde un sujeto le disparó en la cabeza.
El gobierno local anunció el 2 de noviembre que la familia del exfuncionario decidió donar sus órganos.