El total de la deuda se situó el 31 de octubre pasado en 23.008.410.000.000 dólares —una cifra que supera el PIB de países como Rusia, México, Alemania, China y Reino Unido juntos— y ha crecido un 16% desde la entrada del presidente Donald Trump a la Casa Blanca en 2017 debido al crecimiento del déficit presupuestario de EEUU, que alcanzó más de 984.000 millones de dólares en 2019.
26 de octubre 2019, 02:47 GMT
De los 23 billones de dólares, alrededor de 17 billones corresponden a deudas particulares de la población y instituciones financieras, mientras que el resto proviene de préstamos por parte de organismos públicos.
La actual deuda estadounidense duplica la cifra de hace 20 años. Comenzó a crecer rápidamente tras la crisis financiera de 2008 y la llegada al poder del republicano Donald Trump. En enero de 2017, se estimaba en 19,8 billones de dólares, y en febrero de 2019, alcanzó los 22 billones.