"Si bien el actuar de atacante a China (…) ya no sorprende, lo que sí a uno le ha sorprendido un poco es la total incoherencia de los argumentos usados por los protagonistas de diferentes actos de este drama anti-chino", escribió el diplomático, en alusión a las declaraciones a ese periódico hechas por Michael Kozak, subsecretario interino de Estado para el Hemisferio Occidental, durante su reciente visita a Panamá.
"Así ocurrió, puntualmente y ya para la sorpresa de nadie, con una reciente visita oficial a Panamá de quien tengo entendido es el funcionario diplomático norteamericano del más alto rango para el hemisferio occidental", señaló Wei, refiriéndose a Kozak.
El representante del presidente Donald Trump acusó a Beijing de comprometer la seguridad e independencia económica de otros países con deudas insostenibles, mediante métodos comerciales del siglo XIX.
Al respecto, Kozak saludó una iniciativa del Gobierno de Panamá de revisar sus negocios con China para velar que en efecto beneficien a la nación istmeña.
"No hay cosa más absurda que asociar prácticas imperialistas —y para remate, del siglo XIX— con China", replicó el embajador Wei, quien aseguró que su país fue víctima de los atropellos del imperialismo decimonónico, y por ende considera el respeto a las soberanías como un principio inamovible de su política internacional.
El embajador consideró que Washington, a falta de evidencias para desacreditar a China, improvisa o inventa cualquier falacia o pretexto y los enarbola y propaga "sin la mínima decencia y seriedad".
El diplomático asiático señaló que China impulsa la Iniciativa Franja y Ruta, concebida para ser una plataforma de cooperación en condiciones de igualdad y ganancias compartidas, para fomentar la interconexión entre las naciones.
La República de Panamá y la República Popular China establecieron relaciones bilaterales el 13 de junio de 2017, después que la nación istmeña rompiera con Taiwán, al reconocer el principio de una China.