"El problema de la Amazonía es la desinformación, la peor plaga es la desinformación", dijo la ministra en una entrevista con el portal de noticias UOL, y añadió que a pesar de que hay problemas se está exagerando: "Tenemos que reaccionar", defendió.
La ministra remarcó que la Amazonía "no es un sitio donde se produce" y aseguró que relacionar la agricultura y la ganadería con la Amazonía es un "contrasentido", a pesar de que estas actividades son el principal factor causante de deforestación.
A pesar de todo, asumió que el mundo "está preocupado", pero, preguntada por la cuestión, no quiso criticar directamente al Vaticano, después de que el Papa Francisco convocara el Sínodo de la Amazonía, donde se están lanzando mensajes a favor de la selva y de los pueblos originarios.
"Vamos a dejar al Papa con Dios; yo rezo todos los días, el Papa es argentino", zanjó la ministra.
La ministra también defendió que Brasil se mantenga imparcial en la guerra comercial entre China y EEUU, ya que el país norteamericano es el aliado político preferencial del presidente Jair Bolsonaro, pero el país asiático es el principal importador de productos brasileños.
"Vamos a continuar entregando productos de cualidad y mostrando asociación, haciendo cooperación, y poniendo atención; un día ellos [chinos y estadounidenses] pueden entenderse, y lo que tenemos que tener es nuestra porción garantizada", dijo.
La ministra también reveló que recientemente el Gobierno de Arabia Saudita solicitó información sobre compra de tierras en Brasil para producción agrícola.
La ministra dijo ser favorable a la apertura de Brasil a inversiones en este sentido, "con algunas restricciones", pero admitió que es un tema complejo que no está "apaciguado".
Respecto al acuerdo comercial entre la UE y el Mercosur, la ministra minimizó las resistencias que el pacto pueda encontrar en los parlamentos europeos porque, según dijo, aún no se conoce la letra pequeña del acuerdo.
El mes pasado, el parlamento de Austria votó una moción pidiendo que el Gobierno no acepte el acuerdo (para que el pacto entre en vigor se necesita la ratificación de todos los países miembros de la UE y del Mercosur).