En el marco de la audiencia pública con la CIDH y las organizaciones de la sociedad civil, México se comprometió a continuar protegiendo los derechos de los migrantes y asilados, "erradicando todo tipo de expresiones xenófobas, de discursos de odio y de actos de discriminación", informó la cancillería.
"La delegación mexicana reconoció los retos que el Estado mexicano enfrenta en materia de migración y asilo en las circunstancias actuales al ser nuestro país donde convergen las cuatro dimensiones de la migración: origen, tránsito, destino y retorno", agregó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Ante este panorama, México promueve "soluciones regionales basadas en la responsabilidad compartida, el diálogo, la cooperación y en la atención y prevención de las causas que promueve la huida de las personas de sus países de origen y la búsqueda de protección internacional", indicó la cancillería.
Entre decenas de miles de indocumentados se encuentra un número significativo de solicitantes de la condición de refugiado y personas con necesidades de protección internacional, provenientes principalmente del norte de Centroamérica.
La delegación mexicana destacó que una de las acciones prioritarias de esta Administración del presidente Andrés Manuel López Obrador es la ejecución del Plan de Desarrollo Integral (PDI) entre México, El Salvador, Guatemala y Honduras para abordar las causas estructurales de la migración.
El enfoque mexicano es promover que la migración sea "una opción y no una necesidad", mediante iniciativas que mejoren el desempeño económico de esos países, con generación de ingresos, creación de empleos dignos y decentes.
Los representantes mexicanos reafirmaron su "apoyo irrestricto" al Pacto Mundial para una migración ordenada, segura y regular, firmado en diciembre de 2018 en Marruecos.
México ocupa la primera presidencia pro tempore del Mecanismo Integral Regional para la Protección y Soluciones), como complemento subregional al Pacto Mundial de Refugiados.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos, durante una audiencia de la CIDH, afirmó que la cantidad de detenciones de migrantes menores de edad será récord en México en 2019.
México endureció sus políticas migratorias después de firmar un acuerdo con EEUU, el 7 de junio pasado, y asegura que contuvo un 70% el flujo de indocumentados, mediante el despliegue de 25.000 agentes de la nueva Guardia Nacional en sus franjas fronterizas norte y sur.
Este año México espera al mayor número de niñas, niños y adolescentes, ya que a julio pasado llegaron a 38.581, es decir un aumento del 21% respecto del año anterior, según datos del ombudsman federal.
